sábado, 24 de julio de 2010

Fico

Hoy no tengo ganas de escribir.
No me apetece tener que decir que es un día triste.
Porque alguien me ha dicho que ya no estás aquí.
Ya no suenan los laúdes, las bandurrias y los timples.
Las calles de La Palma han quedado vacías,
silenciosas, desnudas sin ti.
Nadie podrá contar más tu última gracia,
eso que nosotros llamamos "golpe".
No quiero oir más que ya no estás,
porque tu voz, tu inmensa bondad,
tu sentido del humor,
tu infinito amor y tú,
no pueden desaparecer así,
de nuestras vidas.

Hoy no tengo ganas de escribir,
porque nos hemos quedado sin fuerzas,
de desear que no te fueses,
de necesitar oirte otra vez,
de contagiarnos de tu sonrisa perenne,
de oir tus mejores consejos, de tu ingenio,
de siempre reirnos contigo.

Hoy no tengo ganas de escribir,
porque no quiero creer,
ni que el mundo sepa,
que mi tío Fico se ha ido.




5 comentarios:

Ana Glez Duque dijo...

Lo siento, Melito.

Lourdes Benítez Carrillo dijo...

Mel, siempre me emocionas con tus palabras, pero en esta ocasión te has superado. Has conseguido expresar no sólo tus sentimientos, sino los de toda la familia y me encanta que lo hayas logrado. De momento, la incredulidad y las lágrimas ocupan todo en mi, espero que todo esto pase para recordar lo afortunados que fuimos al poder disfrutar durante tantos años esa sonrisa perenne que jamás se borrará de nuestros recuerdos. Un beso y un abrazo.

José Amarov dijo...

Estimado señor Melkarr: quienes tuvimos la inmensa suerte de compartir con Federico Carrillo Trujillo una mínima parte del poco tiempo del que disponemos en esta vida recibimos sus sinceras, justas y emotivas palabras con la conmovedora sensación de que todo lo bueno que se diga sobre esta maravillosa persona que antes de tiempo y tristemente nos ha dejado es poco. Muchas gracias, Melón. La vida continúa y ahora hay que apoyar a los que se quedan, porque para eso están las familias felizmente unidas como ésta. Un abrazo y que Dios les bendiga a todos.

Anónimo dijo...

Con la pérdida de Fico, he comprobado la importancia de saber transmitir los sentimientos y el cariño que uno siente, pues aunque no tuve la suerte de conocerlo, su marcha la he sentido y me ha dolido de corazón. Eso se debe a que su sobrino Mel, desde que tengo la fortuna de estar junto a él, siempre me ha hablado maravillas de su tío, de sus virtudes, su bondad, alegría y buen humor. Recuerdo lo feliz que llegó una noche de verano en la Palma depués de compartir unos vinitos con él, difrutó como un niño de la compañía de su tío, y su felicidad hizo que inmediatamente yo sentiera desde esa noche un gran afecto hacia él.Un beso a todos y que Dios bendiga a Fico.

melkarr dijo...

Ahora ha llegado el momento de dejar la tristeza atrás y recordar con una sonrisa toda la felicidad que nos dio un hombre bueno.
Gracias, DraJ: Gracias por tu cariño.
Lourdes, Jose, Lou y todos aquellos que sin dejar comentarios sé que han leído este blog: Ahora nos toca a nosotros tomar el relevo y transmitir esa esencia, ese espíritu y esa forma suya de ser feliz y de hacer felices a los demás. Espero que su recuerdo nos haga permanecer unidos y cuando hablemos de él, sigamos haciéndolo, como siempre hemos hecho, con una sonrisa.